Tu cuerpo, roca
y en el cauce del río
me rozaste en caricia.
Tus brazos, árbol
y en el ardiente sol
me encontré en tu sombra.
Tus labios, brisa
provocando en mí, ser trémula hoja.
Tu boca, armario en mi alcoba
y me arrebujo en tus camisas.
Tus ojos, el libro en mi mesilla
lectura en mis noches
en cada palabra un suspiro, en cada coma una pausa,
en cada punto una tregua y mis dedos
trapecistas en el vértice de tus hojas.
Tu piel, la sabana que me cubre
y yo me envuelvo en busca del aroma que se esconde.
Y tu voz... el manjar de mis oídos.
~~
9 comentarios:
El amor envolvente de caricias y sosiegos. El amor que se siente a manos versos llenos. Un abrazo. H.
Ah el amor!!!!!!!!
Muy bonito!!!!
mmmm....estoy tan de acuerdo...contodo más aún con el último versos....su voz manjar para mis oídos....si que si!!
Mariella
Preciosa metáfora visual y conceptual.
besos
El cuerpo amado nos inspira múltiples sensaciones,logra que nuestra vida tenga sentido.
Saludos
Las sensaciones que nos produce el ser amado, se convierte en nuestro universo.
Un beso desde MG
O sea, un todo en uno. El amor en su apogeo.
Un abrazo
Simplemente precioso...
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