Ella
Siempre valoraba más, la vida de los otros.
de
sus pieles despiertas
de
lenguas que les saborean
de
labios que les besan
de
manos que les susurran sonrisas en los ojos.
de
los que gozan de los días de lluvia escasa
de
los que cuando el sol les es árido, encuentra el descanso en sus sombras.
Ella
se cuestionaba la vida de los otros, ignorando la suya propia.
Ella
era su propia envidia, su inconformismo
i
su resignación, a ella, jamás le importó
cuestionarse
su propia vida.
Quizás,
siempre, sea más fácil, la de los otros.
bd.